Di mi nombre
diciembre 26, 2018
Will you recognize me?
Call my name or walk on by
Sólo resuenan los nombres, imponentes, nítidos y a la vez herméticos nombres. Quienes los poseen son protagonistas de la historia, una historia, cualquier historia. Los seres anónimos son actores de reparto y extras que se pierden en papeles insignificantes aunque a veces perturbadores: dar volumen a una masa informe; pasar de espaldas o de perfil; mostrar un fémur, la clavícula herida, el cordón umbilical como un cable a tierra. Los sin nombre están condenados a desaparecer, desaparecer pronto, desaparecer mejor: han surgido para agitar con su murmullo el tumulto y hacer más solo el desierto. ¿Quién, al final de la noche, recuerda la gesta del ahogado desconocido? Sólo flota —puede flotar— el nombre, el nombre-mantra, el nombre-llave de todas las puertas. ¿Quién rescata del olvido esqueletos carcomidos por el tiempo sin darles siquiera un nuevo nombre para enaltecerlos o llenarlos de compasión? ¿Me reconocerás al final de los días, amado extraño, anónimo creador? Di mi nombre o pasa de largo.
No necesito
May 27, 2014
Todo lo que persiste
noviembre 23, 2013
Después del barco encantado, una vulgar carcasa; luego de la sirena, una extraña osamenta. Eso en la orilla del tiempo, la conciencia de lo que fue y ya no es [o todo lo que persiste al abandono del fulgor].
Ves a tu semejante con un ala
y dices
le sobra un ala.
No ves el ángel carente
nunca el luminoso cuerpo partido
su alarido divino.
Sólo al hombre que le nace una inútil membrana
al desgraciado redivivo
que empieza a sobrarle excelsas prótesis
hacia lo alto.
Lava mi alma
noviembre 26, 2013